Narrativa salvaje - Relato - Poesía en verso y puro teatro.

H /\ !!! - probablemente sea un escritor mediocre, un libertino actor teatral sin recursos, un ser humano despistado, un amante amado, un cantante de voz silenciosa. ¡Pero! si sé que soy libre y es lo único que tengo.

Quizás amante, o quizás nada...

Desde tiempo a, me siento en cuerpo y alma identificado con la cultura nómada lakota sioux, su luna y en todo lo que concierne a la madre naturaleza y su sabia actitud.

Muchas gracias por visitar cuan leer a los sentimientos, sueños e ilusiones que aquí comparto.

Ser libres y cabalgar /\ !!!

sábado, 20 de septiembre de 2008

Septiembre /\ !!!



18 de Septiembre

Al calor del Sol estoy tumbado en la arena, siguiendo el compás de las olas del mar transmitiéndome su paz y libertad. Me dejo pronto caer en un profundo sueño de calma y silencio, gracias a la alegría en la que brillan las olas, mientras mi cuerpo experimenta esa inquietante subida de sudor y calor por todo mi ser.
Abro los ojos, y todo parece haberse detenido ante mí. Experimento un zumbido agradable que proviene de las olas del mar, y me decido a corresponderla sumergiéndome en sus aguas para refrescarme y bailar sobre ella.
La mar está en calma y me regala un aroma parecido al de un gel de ducha. Mi cuerpo lo agradece con simpática excitación que se ha vuelto rebelde y juguetón.

19 de Septiembre

La película ya ha comenzado, pero aún así saco las entradas. Entro a la sala diez minutos tarde, la recordaba mas grande desde que vine con ella por última vez. Quizás siempre fue así, pero ahora me parece mas solitaria y triste.
Observo muchas sombras interesadas en el argumento, - a ambos lados de mí solo hay asientos vacíos, - el resto están todos ocupados.
Intento construir con mi mente esos diez minutos perdidos de película, pero me es imposible. Me quedo profundamente dormido, recostado sobre el asiento vació que hay a mi derecha, pensando que es ella quién me sujeta y me cosquillea el brazo mientras descanso.
El asiento de mi izquierda sigue vació y dejo que mis pies descansen sobre el, para estar mas cómodo sintiendo sus caricias.
De vez en cuando, tengo sobresaltos y veo la realidad, sigue sin haber nadie a ambos lados de mí. No quiero despertarme aún, intento seguir sumergido en mi sueño, hasta que por lo menos acabe la película.
No me atrevo a extenderle mi brazo, me daría cuenta de que ya no esta conmigo, que ya no existo para ella.
Vuelvo a despertar y miro al frente, vislumbro por un momento en la pantalla las imágenes que ante mis pupilas se reflejan. Parezco serio, pero sereno.
No sé cuanto tiempo queda de filmación, quiero dejarme caer una nueva vez en mi profundo sueño, pero esta vez prefiero que se me haga eterno.
¿Y si intento tocarle la mano? A lo mejor ha venido mientras dormía. La idea realmente se me antoja irresistible, pero no puedo acceder a mi deseo, no quiero estropearlo de nuevo, mi corazón se aceleraría si no la siento.
Acabo de sentir unas manos en mi hombro. ¡Es ella, estoy seguro! Me despierto sobresaltado, y no la encuentro a mi lado. Cuando entro en razón, me doy cuenta de que una amable limpiadora me está hablando, la sala debe quedarse vacía para la próxima sesión.
Le doy las gracias y la pido disculpas por mi pequeño lapsus. Me complace con una sonrisa sin molestarse y yo mientras tanto estoy huyendo hacia la puerta de salida, me voy cabizbajo y tengo sueño.
Al llegar a casa, ya todo es distinto para mí.

18 de Septiembre

A sido un baño estupendo, el perfume del agua se me a hecho empalagoso pero agradable. Me encantaría formar parte del frasco que contiene la sabiduría del mar. Me arreglo la toalla para esparcirme sobre ella y sentir la limpieza del aire fresco y mojado que de ella se desprende, mientras tanto le sonrío a la vida.
El caso es que, este aroma que siento me es familiar, diría casi que cotidiano en mi vida.
Siento quemarme y tostarme bajo el sol, mientras que mi sudor baja por mi cabeza hasta mis pies. Siento un acelerón que me sube y me baja sin cesar, convirtiéndose en una increíble y fantástica excitación.
El aliento que desprende el viento se me mete por la nariz, dejándome respirar sin ningún tipo de agobio. Estoy lleno de luz y aire puro dentro de mí.

19 de Septiembre

Esta vez, la sala que elijo es diferente, nunca había estado con ella aquí antes. La película aún no ha dado comienzo, pero ya aparecen los títulos en la pantalla.
Una vez que estoy ubicado en mi asiento, el acomodador se me acerca con su inseparable linterna, para preguntarme lo que no quiero escuchar. El ¿por qué? Si estoy solo, he comprado tres entradas y a ambos lados de mí no hay nadie mas.
- Le ignoro. No quiero escucharle.
Mientras la silueta del acomodador se desvanece en la oscuridad de la sala, me abrazo a mi mismo con la simple intención de buscar calor escuchando a mis sentimientos. Creo que ya va siendo hora de escucharme a mí mismo. Pero ella permanece ahí, inquieta, pensativa y con su mirada sujeta en mí.
Cuando vuelvo a la realidad, estoy recostado sobre mi asiento muy nervioso, aturdido, sudoroso y desesperado. No estoy atendiendo a nada del argumento del dichoso film. Giro mi cabeza hacia ambos lados, y los asientos siguen vacíos una vez mas.
Cuando la película toca a su fin, me doy cuenta de que yo ya hacía un buen rato que había abandonado la sala.

18 de Septiembre

Sin darme cuenta, son las ocho de la tarde. Ya hace tiempo que se ha puesto el sol, no encuentro mejores palabras para decir como me siento al levantarme de la toalla, estoy relajado, libre y despierto ante tanta fragancia de aromas exquisitos.
Recojo mis cosas y me dispongo a guardarlo todo en mi mochila; la loción de spray para el sol, la toalla, el tabaco, el agua, el libro y el MP3.
Me desprendo de mi bañador mojado, sacudo todo mi cuerpo ahora desnudo de los restos que tengo de arena. Saco mi pantalón corto y camisa de tirantes para vestirme. Me vuelvo a casa, estoy contento, soy feliz.
Mientras camino, pienso y observo el ir y venir de la gente que pasea por la orilla del mar, o de aquellos que están recogiendo sus cosas para marcharse a sus casas o a algún otro lugar. Y sin darme cuenta de lo andado, me sumerjo sin quererlo en la explanada, dónde un entregado público observa entusiasmado a la banda municipal de la ciudad desde su histórico anfiteatro, abierto otra vez para deleite del transeúnte. Otros en cambio, pasean, se sientan, discuten, parlotean u observan los diferentes puestos Hippies que existen por todo lo largo y ancho de la explanada de España.
Ante todo esto, se me hace gustosa la idea de pararme unos minutos en mi Taberna preferida a degustar una caña junto con un cigarrillo. No son mas de las 20:30 h, y voy camino del Lizarrán.
Una vez dentro el personal congregado me imposibilita ver una mesa libre para mi propósito, por lo que me decido a aligerar y encaramarme a la barra para pedir mi consumición.
Mientras soy servido atisbo por un momento una mesa con dos sillas vacías, justo a mi izquierda, no muy lejos de la puerta de salida, y no hay nada encima que me indique que está ocupada, recojo mi consumición y me apresuro hacia ella.
Ahora me siento descansado, libre, sensato. – Estoy junto con mi mochila, mi cigarro, mi cerveza y este entorno que me rodea.

20 de Septiembre

El despertador acaba de avisarme que son las 9:30 h de la mañana, me despierto estirando los brazos, mientras mis ojos van abriéndose poco a poco a un nuevo día.
Al abrir mis ojos por completo, lo primero que hago es respirar profundamente, a la vez que apago la alarma de mi móvil, que ya me está sintiendo molesta.
Me dispongo a levantarme y vestirme, cuando observo que hay un pequeño sobre blanco apoyado en una de las esquinas de la cama.
¿Desde cuando esta ahí? - ¿Será de ella?
Al recogerlo, miro a ambas caras del sobre, pero no lleva ningún tipo de nombre o seña alguna. Me dejo caer sentado sobre la cama, a expensas de tener fuerzas para abrirlo y saber que contiene dentro. Abro la solapa del sobre y veo que solo contiene una simple tarjeta blanca, espero unos segundos a sacarla, mientras exhalo aire con los ojos cerrados mirando al frente.
Cojo fuerzas para poder sacar la tarjeta del sobre, al hacerlo, solo consigo leer:

20:30 H / LIZARRAN

Creo entender de qué se trata, aunque yo fantaseaba con la posibilidad de que el mensaje encerrase en sus líneas, algún tipo de reclamo, una cita mas concreta y amable o un cariño claro por su parte.
Tengo todo el día para darle vueltas a lo ocurrido al despertarme, pero es preferible que me evada hasta que llegue el momento de la verdad. Se que estoy nervioso, algo aturdido e inquieto, eso no puedo evitarlo.
Voy a recurrir a mi ingenio para poder estar ocupado la mayor parte de mi tiempo. Desayunaré, me compraré el último disco de Delux e iré a la estación de tren a comprar unos billetes para el día 27 de Octubre a Valencia, seguidamente me acercaré al Centro Comercial a reservar una noche de hotel para dicho día. Quiero que sea una noche muy especial para los dos, juntos veremos a Héroes del Silencio actuar de nuevo y eso será un sueño irrepetible para ambos, o eso creo.
Al volver a casa, me dedico a comer algo, para poco después echarme un rato sin encontrarme cansado, lo único que quiero ahora es no tener su nombre presente por unas horas, quiero estar relajado y tranquilo. Me duermo a los pocos segundos.
Me he desvelado y nervioso miro el reloj, son las 20:05 h de la tarde, todavía me queda tiempo para ir a su encuentro. Me visto lo mas rápido que puedo y salgo de casa sofocado y veloz.
A llegar a la esquina de la Taberna, no son mas de las 20:26 h, y ya estoy entrando en el Lizarrán.


Una vez dentro la clientela me imposibilita ver una mesa libre para mi propósito, por lo que me decido a aligerar y encaramarme a la barra para pedir mi consumición.
Mientras soy servido atisbo por un momento una mesa con dos sillas vacías, justo a mi izquierda, no muy lejos de la puerta de salida, y no hay nada encima que me indique que está ocupada, recojo mi consumición y me apresuro hacia ella.
Ahora me siento cansado, perdido y desesperado. – Estoy junto con mi mochila, mi cigarro, mi cerveza y este oscuro entorno que me rodea.


Son las 21:00 h y ella no ha aparecido.
Solo estoy YO.

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